"¿Por qué comunica el silencio?"

Se aleja, se va
son su lento caminar
que en cada paso
revive un momento nostálgico.
¿La conoces?
Te hablo de
la coleccionista de sentimientos
tristes y buenos,
que saborea a cada momento.
La prisionera de una realidad
que hizo para si,
aunque no la quería así.
La dueña de recuerdos,
de muchos presentes,
del "pasó".
La que siempre busca "ayer"
por sentir miedos.
La de triste mirada,
de besos frescos,
lengua de fuego
y corazón sincero y nuevo.
La que, en sus cabellos,
se llevó en tirabuzones
al sol cuando
le hacia el amor
a las doradas arenas
una tarde de casi primavera.
La de pies ligeros
y mente cansada.
La que mira la nada
observando algo
que a su alma
dio sosiego, paz,
alegría y pasión.
A la que nunca
se le oye cantar,
pero que ahora,
lleva grabadas
las canciones de Sabina
en su piel.
La musa que se le escapó
a Neruda,
el retrato que nunca
pintara Da Vinci,
por que es mi musa,
mi Gioconda,
la que siempre sonríe en mi mente,
la que recita versos a mi corazón.
Debes conocerla.
La más bella y solitaria
mujer que haya conocido jamás.
Si una tarde la ves
con un recorte de sol
tratando de oír la Mar,
buscando un beso en la Luna,
abrigándose con el viento,
protegiéndose con Orión,
recuérdale que
lo que aún alza en sus manos
es mi corazón.
Y dile que no me busque
que venga a mi encuentro
que aún la espero.
Y cuando en respuesta
no emita sonidos su cuerpo
pregúntale, por favor:
"¿Por qué comunica el silencio?"

Foto por: aimeelikestotakepics